Descubre la energía del fuego en la magia con velas

Fuego

Hace unos 500 000 años, pero puede que sea más; el hombre ejecutó el primer acto mágico, producir fuego. Una verdadera hazaña, que cambiaría para siempre el destino de la humanidad. 

Aprender a producirlo, controlarlo, conocer sus beneficios y peligros no fue algo que sucedió de manera espontánea, se necesitaron miles de años, antes de dominarlo.

El Fuego se convirtió en el elemento transformador, despejo el frío y la oscuridad, el iniciador de los avances tecnológicos y, gracias, al fuego, nace la edad del cobre, hierro, bronce, oro, por ende, la evolución. 

Más allá, el fuego se convierte en el poder máximo, el primer elemento en poseer atribuciones mágicas, representación terrestre del poder del sol. 

Es así, como todas las culturas, reconocieron su fuerza interna, el elemento primordial de las antiguas creencias. 

Adoración 

Antes de las edades de los metales, el fuego era considerado como el poder de las divinidades, el centro solar que protegía premiaba o castigaba, sumerios, griegos, egipcios, etc. En todas las culturas, fue la representación divina. 

Todo lo relacionado con él, se convirtió en la fuente del avance, junto con el poder de la magia y, sin duda, tiene la fuerza implícita de la creación. 

Fuego y Magia 

Tanto las divinidades celestiales como infernales poseen el fuego como elemento de poder, uno para premiar y otro para condenar. Estas increíbles condiciones abrieron el mundo de la magia, en todos los rituales, el fuego está presente, en la vida y en la muerte. 

En la vida 

La luz que alumbra los destinos, alejando las tinieblas, destruyendo bloqueos, enemigos, es el arma letal, que ampara, a quien de ella se vale para lograr el triunfo. 
De alguna manera se representa con el oro tan codiciado como símbolo de poder y riqueza, igual, el fuego del amor y la pasión, lo ardiente, el éxtasis, es el que abre las puertas del más allá impidiendo el paso de los desencarnados. 

La ausencia de la luz es la presencia de las sombras. 

Velas y Poder 

En las artes mágicas, el fuego se representa a través de las velas, cuyos símbolos producen un efecto específico, no todas sirven los mismos rituales.

• Un cirio usado en una celebración fúnebre, no se debe volver a usar, solo que sea en rituales de necromancia o rituales de la muerte. 
• Una vela casera para alumbrarse no sirve para hacer rituales. 
• Una vela utilizada en algún ritual no puede utilizarse en otro diferente. 
• Las velas solo son mágicas, cuando en su preparación son conjuradas.
• Las velas de los muertos son para rituales de muertos.
• Solo una bruja o un mago versado en las artes y conocedor de los conjuros de animismo, (Dar anima). Puede activar mágicamente las velas. 
• Emplear velas normales en rituales de magia, no produce ningún efecto.
• Toda vela, produce dos efectos, potencializa una brujería o la anula. 
• Toda vela, al tiempo que ahuyenta sombras o espíritus, también los atrae. 
• Todo ritual, comienza con la luz y termina con la luz. 
• Toda vela, empleada en magia, se debe quemar hasta que se acabe. 

Las velas protegen, aumentan, atraen, purifican, dan poder a los hechizos, al conocer las oraciones mágicas del fuego, los conjuros aumentan su fuerza. 

Ceromancia 

Con el fuego, nace el oráculo más antiguo, el arte de leer los sortilegios o lectura de la suerte, en la cera derretida. 

Nadie puede leer la cera de otra persona, esto es por la interpretación que da, siempre será desde su punto de vista. 

Cada uno, verá en la cera, imágenes diferentes, la técnica es simple, consiste en «ver» las diferentes figuras que se forman, unificarlas en una información, la mente subconsciente, las transforma en señales conscientes o avisos. 

Cuando existen energías que están influyendo negativamente, estas aparecen en diferentes formas, cada persona descubre en ellas el mensaje escondido. 

Desde que se creó el fuego, ha acompañado a la humanidad en todo su avance, dio origen a las primeras brujas y magos, quienes, con él, transformaron el mundo. 

Pensar por un solo momento, en el increíble conocimiento acumulado desde que el hombre pudo generar la primera chispa, hoy, todo cuanto existe tiene como base la transformación del fuego. 

Su poder en la magia es ilimitado, la suerte, la felicidad, el éxito, la pasión, los logros, etc., están irradiados por la luz mágica del fuego.