¿Qué es?

En la antigüedad, las brujas, escondidas en sus cocinas, preparaban lo que necesitaban para sobrevivir. No existían médicos ni nadie que ayudara cuando la enfermedad llegaba, ellas debían tener, como sanar los enfermos, aliviar los entuertos o sanar el alma cuando el mal llegaba sin avisar.

En la cultura griega, la diosa Panacea, fue quien descubrió, usar plantas sagradas, grasas de animales, cortezas de árboles para curar.

Cuando las grasas se derretían con el fuego del poder, quedaba el ungüento, la crema del poder. Las brujas y magos conocían las plantas que hacían bien.

Así, mezclando y probando, conjurando y rezando, comenzaron a sanar, no solo las enfermedades del cuerpo, sino las del alma que causan tanto mal.

Mirando la naturaleza cuando llega más la enfermedad, en invierno o en verano, la gente se pone mal, las brujas llevaron el frío y el calor, fabricaron los ungüentos que son la solución, frío y calor, calman dolores, evitan las irritaciones y con su fragante aroma estimulan la razón.

Al tiempo se dieron cuenta, como la diosa Panacea lo descubrió, o el padre de la medicina Hipócrates de esto también habló, que una mente enferma, el cuerpo ha de enfermar, que hay energías que todo pueden alterar. Los ungüentos de las brujas curan algo más, los males postizos o influencias negativas, que nada puede calmar.

Dos ungüentos sagrados se deben usar, para mantener el equilibro y en armonía la mente y cuerpo en paz deben estar.

Hay malestares que no son de cuerpo, si no del alma son. La tristeza, el engaño y la depresión. La ira, el odio, el desamor, la angustia, el ahogo y la desilusión enferman el cuerpo y causan dolor. Es cuando los ungüentos pueden ayudar a calmar lo que está mal. 

¡Advertencia! Este producto mágico. No… remplaza tratamientos médicos, no remplaza, ni lo pretende, la visita a su servicio de salud ante cualquier síntoma. Su salud es su responsabilidad, si bien es una ayuda, usted debe ser consciente que, primero: antes de pensar en influencias mágicas, debe consultar con un facultativo que analice su estado de salud. Es su responsabilidad.